Las canciones que me han ayudado a sobrevivir a enero

Este puñado de canciones me ha ayudado a sobrevivir a enero… Así que, desde aquí, solo puedo dar las gracias a Cristalino, JADE, Laskaar, Twin Shadow, Pumuky, Hannah Cohen y Röyksopp.

«Segundo Premio», la película que no es un biopic de Los Planetas pero en la que Cristalino interpretaba a Florent, no fue el principio de todo para este artista aunque sí que sirviera para poner en el mapa al músico y actor granadino. Aprovechar o no la impronta que le dio el estreno de Isaki Lacuesta ya dependía totalmente de él… Por suerte, el reciente lanzamiento de su EP «CRISTALINO EP II» pone sobre la mesa la certeza de que estamos ante un artista capaz de forjarse una carrera de larga tirada.

«La Vida en Marte» es la canción que abre el mencionado EP…. y también es mucho más. Con producción de Jaime Beltrán (habitual de otros artistas como Nacho Casado), el tema echa el ancla en las aguas de brumas sintéticas en las que ya están fondeados otros músicos que están bordando la prosa urbana con el corazón en la mano y el pie de calle, tal y como Alixxx o Sen Senra. Pero lo hace mirando tanto hacia un futuro de pop soleado como hacia un pasado en el que conviven referencias ilustres que van desde Family a Maga.

Lo interesante aquí es que la pluma de Cristalino huye de la literalidad emocional de la música urbana para explorar una poética con acento granaíno. «Siento que todo depende de un fino alambre, de una moneda al aire, del sol al final de la tarde. Siento que todo se enreda en vez de soltarse. Tú eres misterio insondable, igual que la vida en Marte», canta el artista en una de las muchas imágenes que, tras la escucha de la canción, se te quedan prendadas en el pelo como la brisa de agosto protegiéndote de un sol de infierno.

Hace medio año (aproximadamente, qué sé yo), JADE lo petaba muy fuertemente con «Angel of my Dreams», un temazo que venía acompañado de un videoclip que hacía pensar poderosamente en Lady Gaga tanto por la propuesta musical como por la solidez de su universo estético. Otra cosa que quedaba bien clara con «Angel of my Dreams» era que JADE iba a tener una carrera bien sólida lejos de las Little Mix con las que accedió al éxito masivo y al corazón de los maricones del mundo entero.

No es difícil intuir que 2025 va a ser el año de JADE, sobre todo porque cerró el mes de diciembre con esta «IT Girl» que no se coló en las listas de lo mejor del año de ningún medio porque ya se sabe que ahora los medios hacen sus listas en octubre. Bullshit aparte, «IT Girl» sigue invocando el espectro de aquella Lady Gaga que en sus inicios cantó tanto y tan bien sobre el monstruo de la fama. Y que lo hizo taconeando con fuerza sobre la superficie de esas rítmicas percutientes que casan de forma tan natural con el pop empoderado.

Mi debilidad por Laskaar está ampliamente documentada porque, a quién quiero engañar, casi cada nuevo temazo que ha lanzado me ha obligado a escribir sobre él por aquí o por allá (o en el más allá de las redes sociales). Porque esa es otra: el tío no para. Y el mejor ejemplo de ello es que, tras coronar el 2024 con uno de los grandes temazos del año (su tremendísima «NO TENGO BATERÍA» junto a Putochinomarición), decidió poner el broche final pluscuamperfecto con una versión del «Quién Te Cantará» de Mocedades.

Dice el artista que fue una de las canciones preferidas de su infancia, y se nota el respeto que le tiene al material primigenio a la hora de traerlo al siglo 21 arropándolo en un envoltorio de electro-pop nocturno que sintoniza de forma profunda con la tristeza de una frase tan mítica como la de «¿quién te hará el amor?». Si Mocedades tuvieron a los Carpenters como faro guía, Laskaar consigue ser fiel al espíritu original de la canción extrapolándolo al baile de espectros de la era digital que acaba llevando al estremecimiento nostálgico en los deliciosos acordes finales de guitarra española.

¿Quién me iba a decir que estaría aquí, en pleno año 2025, escribiendo de nuevo sobre un Twin Shadow al que hace algún tiempo que le había perdido la pista? Porque lo cierto es que, por mucho que su «Forget» (Terrible, 2010) siga siendo un disco al que vuelvo de vez en cuando a la búsqueda de pop lo-fi empapado de sexualidad dudosa, a partir de su tercer «Eclipse» (Warner Bros., 2015) la cosa empezó a ser tan (no deliberadamente) hortera que fui incapaz de seguirle el ritmo.

Pero dice George Lewis Jr. que su nuevo disco «Georgie» (Cheree Cheree, 2025) va a ser diferente porque estará dedicado por completo al recuerdo de su padre recientemente fallecido… Y algo de esa emotividad a flor de pie se siente ya en el primer single «As Soon As You Can«, una composición que se construye alrededor de una guitarra triste y unos sintes a veces espaciales, a veces cristalinos, a veces acuosos, siempre matadores cuando resuenan en el (casi) vacío. No puedo explicar exactamente por qué, pero «As Soon As You Can» se quedó viviendo dentro de mi estómago la primera vez que la escuché… y no he podido deshacerme de ella desde entonces.

Hace diez años que Pumuky no publican un disco de larga duración… Pero da igual, porque hay algo que, pasen los años que pasen, sigue ocurriéndome con la música de los hermanos Jaír y Noé Ramírez: son de los pocos artistas capaces de conseguir que me lance al interior de una canción slowcore y que me quede ahí dentro, hecho un ovillito, disfrutando y sufriendo al mismo tiempo.

Pero es que Pumuky practican el slowcore como si fueran túneles cósmicos en los que viajas a través de torbellinos de colores que te fascinan y abruman a la vez… Eso es lo que vuelve a ocurrir en esta «Lo Recuerdo Todo» que avanza un «No Sueltes Lo Efímero» (Keroxen, 2025) que se publicará a finales de febrero y que invitará a escucharlo, abrazarlo y quererlo tal y como dice esta misma canción: «Curvando el tiempo y el espacio». Así es la música de Pumuky.

Hace unas semanas, hablaba en la newsletter centrada en mis favoritos de 2024 de que, musicalmente hablado, el año pasado fue tiempo de folk femenino, pero«no folk como lo entendíamos hace 20 años, sino ese nuevo folk que se aleja de la crepuscularidad pastoral americana que practican (y elevan) artistas como Angel Olsen y que se abren a otros sonidos, otros folclores, otros microcosmos».

Y parece que en 2025 también me va a dar fuerte con este rollo, porque he empezado el mes de enero volviendo una y otra vez a esta «Earthstar» de Hannah Cohen que es avance de un disco con colaboraciones de Sufjan Stevens y Clairo. Así que no es difícil ver por dónde van los tiros (y entender el por qué de mi obsesión).

¿De verdad tengo que explicar por qué este ha sido mi «repeat» más vicioso del mes de enero? Pues, venga, voy rapidito: Röyksopp van a lanzar un nuevo disco titulado «True Electric» en el que mayormente incluirán viejas canciones en nuevas versiones que se adapten mejor al rollo bailable de su actual gira. En el lote estarán colaboraciones con Robyn como «Ther Girl and the Robot» o «Monument»… Pero dudo que ninguna de esas supere esta «What Else Is There?» que en su momento bordaron junto a Fever Ray y en el que, ahora junto a Trentemøller, han canalizado un espíritu de danza maximalista que es mi mood para 2025.

Sinceramente,

Raül De Tena

Sobre el autor

Raül De Tena

Al ponerme a escribir esta bio me he dado cuenta de que, así, a lo tonto y como quien no quiere la cosa, llevo más de veinte años escribiendo sobre temas relacionados con la música, la moda, el cine, la literatura, la cultura en general. Siempre he escrito muy sinceramente... Pero, ahora, más todavía.

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Por Raül De Tena

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Al ponerme a escribir esta bio me he dado cuenta de que, así, a lo tonto y como quien no quiere la cosa, llevo más de veinte años escribiendo sobre temas relacionados con la música, la moda, el cine, la literatura, la cultura en general. Siempre he escrito muy sinceramente... Pero, ahora, más todavía.

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